Las dos nuevas obras recorren la vida del líder pacifista sudafricano
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| Reproducción del libro Nelson Mandela el cómic autorizado, con prólogo de Nelson Mandela.foto.fuente:elpais.com |
Activista, líder político y héroe mundial de la paz, la vida de Nelson Mandela
(Sudáfrica, 1918) debería ser un ejemplo para los dirigentes actuales.
El periodista polaco Ryszard Kapuściński, que fue uno de los mayores
conocedores y divulgadores de la historia del continente negro, le
definió como “uno de los padres de África”, el hombre que terminó con la
segregación racial en su país. Dos nuevos libros reivindican su legado
de esperanza y tolerancia: Nelson Mandela por sí mismo (Plataforma Editorial), su libro de citas autorizado, y Nelson Mandela. El cómic autorizado (Editorial Escalera), una colaboración de la Fundación Nelson Mandela y la compañía de cómics sudafricana Umlando Wezithombe.
Ambas obras suponen un recorrido vital por la trayectoria del líder
sudafricano. El libro de citas está escrito a modo de diccionario
alfabético en el se recogen los grandes temas que han marcado la vida
del lider negro (antirracismo, clandestinidad, libertad, prisión,
xenofobia...) junto a otros más íntimos (arte, música, sexualidad...)
que sin duda interesarán a quienes quieran conocer el lado más humano de
Mandela.
El cómic es una biografía visual que ilustra los momentos más
transcendentes de su vida: su infancia en el pequeño poblado de Mvezo,
sus comienzos como agitador social, su encarcelamiento en la isla de
Robben Island y su consagración como líder político. El capítulo final
narra el momento en el que Mandela juega su mejor carta y brinda su
apoyo al equipo de rugby sudafricano (cuya afición era blanca) en la
final de la copa mundial de 1995 celebrada en su país. La selección
nacional ganó la copa en un partido histórico, convertido en película por Clint Eastwood. Fue uno de los eventos que más contribuyeron a la reconciliación nacional.
En el prólogo del cómic, escrito por el propio Nelson Mandela, el
exlíder expresa su deseo de que este tipo de lecturas conduzca al
disfrute de otras consideradas más serias.
Una vida heroica
Sudáfrica vivía un conflicto social y racial profundísimo desde 1948, año en el que el Partido Nacional instauró el apartheid
(que en lengua afrikáans significa separación), un abominable sistema
jurídico y social que privilegiaba a la raza blanca, reprimía
salvajemente a la oposición y marginaba a los negros prohibiéndoles el
voto, la educación y la libre circulación por su propio país, entre
otras cosas. El joven Nelson Mandela comenzó a liderar los movimientos
de resistencia y en 1962 fue arrestado y condenado a cadena perpetua. En
prisión continuó combatiendo al régimen y se convirtió en el líder
negro más famoso de su país.
Pasó 27 años en la cárcel, hasta 1990. 27 largos años hacinado,
maltratado y obligado a trabajar bajo el sol en condiciones
infrahumanas. Pero al ser liberado no predicó venganza, sino
reconciliación, tolerancia y amistad, motivo por el cual ganó el Premio Nobel de la Paz en 1993. Y con su mensaje de paz consiguió ganar las elecciones en 1994,
liderar una transición política pacífica y crear un sistema democrático
multirracial. También hizo algo inusual en un político con éxito:
abandonó el poder en 1999 y una vez logrado su objetivo, se dedicó a
trabajar por los sectores más desfavorecidos de la sociedad.
Aunque la desigualdad en Sudáfrica no terminó de la noche a la
mañana, Mandela evitó el desencadenamiento de una guerra civil. “Fue un
milagro”, comentó Kapuściński, “un caso casi único en la historia: una
sola persona, extraordinaria, Nelson Mandela, consigue llevar a cabo una
empresa que está más allá de la imaginación”.
El Mandela íntimo
J. M
Junto a las grandes cuestiones que rodean la vida
del líder africano (Libertad, Esclavitud, Pobreza, Sudáfrica), el libro
de citas de Mandela recoge otras categorías más íntimas y menos
conocidas. Estas son algunas.
Amargura: “Quizás si estuviera desocupado y
no tuviera ningún trabajo que hacer, me sentiría tan amargado como los
demás. Pero a causa del trabajo que se me ha asignado, no he tenido
tiempo de pensar en las crueles experiencias por las que he pasado”.
(Cumbre de la OUA, 8 de junio de 1998)
Amor: “Os quiero a todos. Desearía llevaros a
todos en mis bolsillos para mostraros cuanto os amo”. (De un mensaje a
los jóvenes de Sudáfrica, 1 de diciembre de 2000).
Artes: “El buen uso de la fotografía puede
incluso darle a la pobreza, con todos sus harapos, su mugre y sus
bichos, un toque sublime raramente perceptible en la vida real”. (Carta a
su hija Zindzi Mandela, 27 de enero de 1980)
Comida: “Un ser humano, independientemente
de su color, y de si vive bajo un régimen de cristianos, fariseos,
hipócritas, paganos o de aquellos que eligen flirtear con el diablo,
nunca debería ser obligado a considerar que ingerir alimentos es solo un
deber”. (Carta a Winnie Mandela, su esposa hasta 1996, 31 de agosto de 1970)
Felicidad: “Hay momentos de felicidad en que
me río solo pensando las oportunidades que he tenido, así como en los
momentos de placer”. (Carta a Winnie Mandela, 1 de octubre de 1976).
Humor: “Tenemos sentido del humor porque
creemos que es nuestro deber hacer que la gente se olvide de sus
problemas”. (Entrevista con el escritor de viajes Tim Couzens, 13 de
agosto de 2005).
Lenguas: “No queremos suprimir ninguna
lengua, lo que queremos es mejorar la situación de las lenguas
africanas, que han sido marginadas mediante las estrategias del
apartheid”. (Conversación con el periodista norteamericano Richard
Stengel, 29 de abril de 1993).
Música: “La música africana es algo que va
directamente a tu corazón y te cuenta la historia de tu propia vida, tus
circunstancias y tus aspiraciones”. (Conversación con Richard Stengel,
25 de marzo de 1993).
Pesares: “Tengo un pesar que me ha
acompañado toda la vida: que nunca me he convertido en el campeón
mundial de boxeo de los pesos pesados”. (Acto con el presidente Bill
Clinton, 1990).
Sexualidad: “Cuando fui a la cárcel, me
resigné al hecho de que no tendría ninguna oportunidad para la expresión
sexual y que tendría que lidiar con eso”. (Conversación con Richard
Stengel, 9 de marzo de 1993).
Sida: "Tenemos que amar, alentar e
inspirar a las personas que son seropositivas. Esta es la mayor
contibución que podemos hacer en la lucha contra el sida." (Ciudad del
Cabo, Sudáfrica, 12 de diciembre de 2002. El hijo de Mandela, Makgatho
Mandela, de 54 años, falleció de Sida el 6 de enero de 2005).
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