Versos salvados del anonimato

Colección Un libro por centavos presenta su número 70 Un proyecto sin "sesgos políticos o de otro tipo", que le da visibilidad tanto a plumas consagradas como a nuevas voces

Versos salidos del anonimato.foto.fuente:vive.in

Hace más de cinco años, Miguel Méndez Camacho, poeta y decano cultural de la Universidad Externado de Colombia, le dijo a la junta directiva del plantel: "Les propongo un mal negocio: una colección de poesía en un tiraje muy importante, con libros bellos, coleccionables, muy económicos, en donde la universidad haga una inversión que es destacar la actividad intelectual. No todo puede ser negocio".

Así nació 'Una colección por centavos', que presenta, en el marco del Festival de Poesía de Medellín, su número 70 y que -como anota su creador- "le permitió a los poetas latinoamericanos salir del anonimato".

Pero que además, tiene un carácter universal, sin "sesgos político o de otro tipo", que le da visibilidad tanto a las plumas consagradas como a las nuevas voces.

Méndez Camacho comenta que en el país de la poesía, es el único lugar en donde ocurre que, mientras la edición más reciente de la colección ('Lenguaje de maderas talladas') es una selección de la poetisa María Clara Ospina, hija del ex presidente Mariano Ospina Pérez, tres números precedentes recoge los versos de ideólogo izquierdista Armando Orozco ('En lo alto del instante').

"Imagínese, ya tenemos 70 ejemplares y tengo la vanidad de pensar que llegaremos a los 100", agrega su creador, que ya tiene en espera 37 libros, y trabaja en la selección la obra del mexicano Homero Aridjis, quien visitará al país en los próximos meses.

Cada número de 'Una colección por centavos' tiene un tiraje de 8.500 ejemplares y cuenta con el apoyo da la revista cultural 'El malpensante' paral la distribución nacional.

"De esta manera, los escritores no se quedan con 300 ejemplares debajo de la cama, como suele ocurrirles", comenta Méndez, quien se enorgullece de haber sacado de las fronteras colombianas la colección. "Siembre que viajo voy, como un culebrero, con mis libritos debajo del brazo, que han circulado en Quito, en Lima, en Chile, en Buenos Aires en España y en México".