15.1.15

Una década felizmente muy negra

Philip Kerr, Anne Perry, Sue Grafton y Alicia Giménez Bartlett, entre los autores invitados al festival BCNegra, que cumple 10 años
Alicia Giménez Bartlett recibirá el premio Carvalho en el marco de la BCNegra. / Massimiliano Minocri./elpais.com


Desde no poder ni llenar en 2006 el modesto Espai 4 del Palau de La Virreina a tener que abandonar La Capella y cambiarlo ahora por el auditorio del Conservatorio del Liceo, con capacidad para 392 personas, como nuevo escenario del crimen. Sí, BCNegra, el encuentro de novela policiaca de Barcelona, cumple 10 años, década que ha ido jalonando con picos de éxito (presencia, y premio Pepe Carvalho, de Henning Mankell en 2007; de Roberto Saviano en 2009; de Andrea Camilleri el año pasado, elevando los asistentes un 52%, hasta el récord de 9.900 personas)... Y la mejor manera de celebrarlo es haciendo más sangre: incremento de presupuesto en 40.000 euros por parte del Institut de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona para dejarlo en 140.000 euros (“hay que apoyar a los editores en momentos de crisis”, dicen en el consistorio) y una programación que, del próximo día 29 hasta el 7 de febrero, concentrará en Barcelona a unos 70 autores, desde Sue Grafton a Philip Kerr, pasando por Anne Perry, Dolores Redondo, Alicia Giménez Bartlett (premio Carvalho 2015), Laura Restrepo, Lorenzo Silva o Víctor del Árbol, de entre el casi centenar de participantes.
“Creo que hemos sacado definitivamente a la novela negra del gueto en el que estaba; también es fácil con el caldo de cultivo que proporciona Barcelona, a partir del consorcio de Bibliotecas del consistorio y de la Diputación; somos ya referencia: el premio Carvalho es prestigioso y las editoriales sacan novedades del género en el peor mes libresco del año… Somos el certamen de novela negra más importante de Europa en invierno”, enmarca el comisario y alma máter del evento, el librero Paco Camarasa.
Quizá para reforzar más que nunca ese liderazgo, con la ayuda de 43 editoriales, 27 librerías de toda Cataluña y 15 entidades, BCNegra presenta este año más de medio centenar de actividades gratuitas y extiende la mancha negra (o roja) por todas los ámbitos posibles, desde el arte a la sanidad pasando por la economía, el deporte, la economía los medios audiovisuales.
Pintura, cómic… y fotografía. Como la BCNegra lo impregna todo, aprovechará ya el primer domingo de febrero con el MNAC en jornada de puertas abiertas para hablar de los bajos fondos y preguntarse qué pintaría hoy Carles Casagemas (que retrató el lumpen de principios de siglo XX, como muestra una exposición en el museo) y organizar allí una mesa redonda con, entre otros, el hoy escritor Dani el Rojo (exatracador de bancos). Las portadas de los libros del género en las grises décadas de los 40 a los 60, con nombres cargados de seudónimos exóticos y apuestas gráficas de toda condición, podrán contemplarse en la Biblioteca Jaume Fuster. El relato criminal no podía quedar fuera del cómic y la novela gráfica, géneros de moda, como entre otros demostrará Juan Sasturain (5 de febrero; Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales de la Universitat Ramon Llull). Gris, por no decir negra, fue también la Barcelona de los hermanos Muñoz Ramonet, llena de expolio moral y material; ese escenario recreado libremente por una serie de fotógrafos, comisariados por Carme Centrich, podrá visitarse en la galería Barcelona Visions.

Philip Kerr presentará en BCNegra a su nuevo detective, que investiga el lado oscuro del mundo del fútbol. / Marcel·Lí Sàenz.

'Star system', de visita. La presencia de estrellas del género será constante. Arrancará la inglesa Anne Perry, el viernes 30, conversando a partir de sus novelas, que abarcan desde el Londres victoriano a las trincheras de la Primera Guerra Mundial. Por persona interpuesta, su editora en Tusquets y amiga Beatriz de Moura, estará también Mankell, el padre de Kurt Wallander, al que, tras conocerse su lucha contra un correoso cáncer, se quiere homenajear tanto recorriendo su obra como con la posibilidad de que los asistentes le envíen una postal como muestra de solidaridad (2 de febrero; Conservatorio del Liceo). Kerr, el padre del subgénero de los detectives en la Alemania nazi, aprovechará su estancia en Barcelona (3 de febrero; Conservatorio del Liceo) para hablar de su nueva saga protagonizada por el detective Scott Manson, que investiga… el muy negro mundo del fútbol. Redondo (madre de la exitosa La Trilogía del Baztán) no podía faltar en una mesa redonda, junto a Mikel Santiago y la islandesa Yrsa Sigurdardottir, si hay que hablar de leyendas y de elementos sobrenaturales en los crímenes (4 de febrero; Conservatorio del Liceo). Sue Grafton, por su parte, llega al final del abecedario criminal: su Kinsey Milhone va ya por la W (W de whisky), como le deletreará al también autor del género Toni Hill (6 de febrero, Sala Barts). La gran estrella será, sin embargo, Giménez Bartlett: recibirá el premio Carvalho (5 de febrero, Saló de Cent del Ayuntamiento) y hablará al día siguiente (Sala Barts) con sus editores extranjeros sobre su personaje, Petra Delicado, la primera mujer policía. Sus novelas y las de autoras como Berna González Harbour protagonizarán una mesa redonda (19 de febrero, Ateneu Barcelonès) con el sugerente título Las ‘malas mujeres’ en la novela criminal.
Crímenes financieros y sanitarios. La salud, el crimen y la industria farmacéutica no están tan lejos ni son términos contradictorios, como demostrarán escritores como Belén Gopegui, Maribel Medina y Alberto Curiel, (3 de febrero; Conservatorio del Liceo). Y que en Barcelona hay una economía delictiva lo harán aflorar en otra mesa redonda personalidades, entre otras, como Itziar González (ex concejal del inquietante distrito de Ciutat Vella, que sufrió amenazas criminales hasta que dejó el cargo), el jefe del Área del Crimen Organizado de los Mossos d’Esquadra, Antonio Rodríguez Herrera, o el escritor Carles Quílez (4 de febrero; Conservatorio del Liceo).
El deporte de la corrupción. Los tufos del mundo del deporte no saldrán solo de los campos de fútbol denunciados por Kerr: un encuentro en el que participarán, entre otros, Santiago Roncagliolo y Juan Sasturain, desvelará qué hay de ficción (poca) y de realidad (bastante) en obras suyas en las que han abordado la cara más oscura de la supuesta vida sana: drogas, apuesta ilegales, extorsiones… (5 de febrero; Conservatorio del Liceo).
Asesinatos en la pantalla. Que el crimen es uno de los menús predilectos del espectáculo televisivo lo saben espectadores y periodistas y también escritores, que lo han plasmado en sus novelas. El escritor José Sanclemente y el periodista José Yoldi, entre otros, moderados por el también periodista Pere Rusiñol, debatirán sobre límites y prácticas de una información siempre espinosa desde lo ético y moral (6 de febrero; Col·legi de Periodistes de Catalunya). La Filmoteca de Cataluña, por su parte, cree que Fu Manchú tenía razón: bajo ese epígrafe articula, en las únicas actividades de BCNegra que deben pagarse, un ciclo de siete películas del género, desde The mysterious Dr. Fu Manchu (3 de febrero) a Chinatown, así como una sesión (30 enero) dedicada a Carlos Pérez Merino Merino, escritor (Días de guardar) y director y guionista (Otro cuento de Navidad; Estación de Chamartín).
Y además… Del medio centenar de convocatorias también sobresale la recuperación del Premio Crims de tinta, que hace dos años dejó de convocar el Departamento de Interior de la Generalitat y que servirá para abrir oficialmente BCNegra (29 de enero; sede RBA); la disección de espías, infiltrados y agentes dobles, esos hipócritas del género (2 de febrero; Conservatorio del Liceo); los crímenes que ocurren empezando por la B de Barcelona o Buenos Aires, capitales del crimen literario (3 febrero; Conservatorio del Liceo); la banda sonora generada por el género entre los años 40 y 50 con un concierto de la Barcelona Big Blues Band, a la que se añade el saxofonista y experto en noir Dani Nel·lo... En fin, quizá una de los mejores ofertas y de mayor impacto local e internacional que promueve hoy el consistorio barcelonés. Un crimen perdérselo.

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