Personajes. Leyendo hace poco un viejo cómic me encontré una palabra que era famosa en las historietas
Imagen de manga./eltiempo.com |
¡Cáspita!
Nunca la he oído en la vida real. Me refiero a
“cáspita”, una insólita exclamación que solo pronunciaban la Pequeña
Lulú, el Pato Donald, Daniel el Travieso y otros personajes así. ¿Por
qué se usaba y por qué no se usa ya esta palabra?
Nicolás Bonilla Medellín.
Nicolás Bonilla Medellín.
Me llama la atención su carta, porque yo
también recuerdo que los cómics y quizá algunas películas estaban
pobladas de interjecciones tan curiosas como la que usted menciona, y
“recórcholis” y “sniff, sniff”, por ejemplo. Esta última era una
onomatopeya del sollozo y evidentemente proviene de los cómics en
inglés, pues “sniff” significa en esa lengua inhalar, oler, aspirar aire
por la nariz de manera ruidosa. “Recórcholis” aparece en el diccionario
oficial del español como sinónimo de “córcholis” y esta como eufemismo
de “caramba”. Que, agrego, es, a su turno, eufemismo de “carajo”. La
historia de “cáspita” es más complicada. La registran el diccionario
oficial y el de María Moliner como expresión de asombro, enfado o
sorpresa. Su origen es, según el académico español Joaquín Calvo Sotelo,
el término italiano “capperi”, que significa alcaparras. No pude
encontrar si en algún momento los italianos emplearon dicho sustantivo
como interjección, de la misma manera como en español se usa “cielos” o
“naranjas”. Calvo Sotelo sugiere que esta clase de usos eran típicos de
las comedias de los siglos XVIII y XIX. Lo cierto es que los dos
diccionarios y el académico sostienen que es expresión en desuso. Sin
embargo, estoy segura de que si uno se lo dice a la Pequeña Lulú, esta
responderá “¡pamplinas!”.
Aunque el Moliner dice que es interjección que
corresponde a un “elogio insincero o inoportuno”, está claro que en el
mundo del cómic y en esferas parecidas se aplica más bien a algo que se
desprecia por insignificante, sea un elogio o no. Más acertado, el
diccionario oficial señala que se dice de una “cosa de poca entidad,
fundamento o utilidad”. Una bobería, una tontería, una pendejada. Decir
pamplinas, pues, equivale a decir boberías, tonterías, pendejadas... En
su libro El por qué de los dichos, José María Iribarren destaca el
origen botánico del término, que correspondió hace algunos siglos a la
amapola, más tarde a la lenteja acuática y la hierba llamada “oreja de
ratón”. Precisa que se trata de “una planta herbácea anual de las
papaveráceas”, pero reconoce que más allá del sentido botánico designa a
una cosa insignificante. Que es el sentido en que lo habría usado la
Pequeña Lulú.
Reanudar y reiniciar
Durante la reciente Copa Mundo oí
repetidamente por la radio que un partido suspendido por una falta o una
lesión se reiniciaba. Pero siempre he pensado que no se reiniciaba sino
que se reanudaba, porque no volvía a empezar sino que seguía después de
una pausa. Dígame si estoy en lo cierto.
F. Romero G. Bogotá.
F. Romero G. Bogotá.
Por supuesto que sí. Reanudar, según el
diccionario de las academias, significa “renovar o continuar el trato,
estudio, trabajo, conferencia, etc.”. Lo cual puede aplicarse también a
un partido de fútbol interrumpido. En cambio, dice la misma fuente,
“reiniciar” es sinónimo de “recomenzar” y este verbo quiere decir
“volver a comenzar”. Así las cosas, un juego que se ha detenido por
alguna razón puede reanudarse. Pero solo se reiniciará si, por ejemplo,
se anula por determinada causa y los dos equipos vuelven a enfrentarse
desde el primer pitazo.
PERSONAJES
Nadine Gordimer, autora surafricana, Premio Nobel 1991. |
Nadine Gordimer
La novelista y premio Nobel sudafricana,
fallecida a los 90 años, puso su pluma al servicio de la lucha contra el
apartheid, explorando a través de sus personajes la crueldad y la
injusticia de la sociedad que la rodeaba. “Cuando se escribe, uno jamás
está aislado de su sociedad ni del mundo”, decía esta anglófona, quien
se negó siempre a irse de Sudáfrica, incluso en las horas más sombrías
de la segregación racial. Pero “un autor debe tener cuidado en una
situación conflictiva, en la que las opiniones son fuertes, para no
terminar escribiendo propaganda”, añadía… Esta hija de inmigrantes
judíos desarrolló una prosa a su imagen y semejanza: sobria, sútil y sin
concesiones. Dejó 15 novelas, entre ellas La hija de Burger, La
historia de mi hijo, Nadie que me acompañe y numerosos libros de cuentos
(El abrazo del soldado, Algo a lo lejos), algunos de los cuales fueron
prohibidos bajo el apartheid. Mediante retratos de una gran fineza
psicológica, cuenta las ambigüedades de sus compatriotas. “Esta mujer es
una artífice suprema, audaz, juvenil, alerta, memoriosa y profética del
imperecedero arte de narrar. Esta mujer fue la abanderada de la lucha
contra el infame apartheid en Sudáfrica”, dijo Carlos Fuentes (AFP).
Frida Kahlo, pintora mexicana. |
Frida Kahlo
Se conmemoran natalicio y muerte de la pintora
mexicana Magdalena del Carmen Frida Kahlo Calderón. Coayacán, México,
julio 6, 1907; ibídem julio 13, 1954. Padeció desde niña poliomielitis,
que le generó postración e innumerables cirugías, sumándole un accidente
de bus chocado por un tranvía donde quedó fracturada en su totalidad.
Nació y murió artista, jamás disfrutó de su gloria porque su época de
oro pictórica surgió después de los 60. Adelantada a su época por
mostrar abiertamente su bisexualidad, le costó el rechazo social, a
pesar de estar casada con el muralista mexicano Diego Rivera, situación
ambigua que las gentes de su época nunca pudieron comprender, porque
jugaba fútbol y practicaba boxeo como terapia de recuperación a causa de
su enfermedad. Su obra pictórica traspasó fronteras, siendo la primera
artista mexicana en colgar un cuadro en el Louvre en 1939.
Helena Manrique Romero. Bogotá
Helena Manrique Romero. Bogotá
No hay comentarios:
Publicar un comentario